Desde Pasco 255, el jueves 12 de octubre un micro de dos pisos comenzó su viaje hacia la ciudad de Bariloche pasadas las 15 horas. Las esperaba el 36 Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas Travestis, Trans, Bisexuales, Intersexuales y No Binaries, invento argentino y ritual único en el mundo.
El clima fue una fiesta. Las docentes universitarias de CONADU se desparramaron abajo, y las metrodelegadas del subte coparon la planta alta a puro karaoke. “Cero, tres, cero, tres, cuatro, cinco y seis, lalalalalalará”, “Cuando calienta el soooooollllll, aquí en la playaaaaa”, “¿Quién es? /Soy yo/ ¿Qué vienes a buscar? / A ti / Ya es tarde/ ¿Por qué? /Porque ahora soy yo la que quiere estar sin ti!!!!”. Veinte seis horas de risas, charlas, camaradería pero también descanso para poder poner los cuerpos a disposición de los talleres y las actividades culturales que durante tres días se desarrollaron a lo largo y ancho de la ciudad patagónica.
“El sindicalismo feminista llegó al Encuentro para construir entre todas y todes la alternativa de nuestro pueblo para seguir defendiendo los derechos conquistados y para ganar nuevos derechos. Queremos más universidades públicas por ejemplo y eso lo tenemos que construir en las calles. Por eso es necesaria la más amplia unidad de los feminismos, de los transfeminismos y esa es la bandera que traemos las trabajadoras sindicalistas”, señaló Ayelén Díaz, la “Pipi”, directora de Género y Diversidad de CONADU.
En la misma línea se posicionó Victoria Ilarregui, Secretaria Nacional de Igualdad de Género del SUTEPA, el Sindicato Unido de Trabajadores y Empleados de PAMI: “Es muy importante la participación de las trabajadoras organizadas para demostrar una vez más que la lucha es en la calle, que la lucha es en estos lugares donde se discute la política y la paridad y la igualdad para las mujeres y las disidencias. Dentro de nuestros sindicatos vivimos luchando todos los días para que eso sea posible, y venimos al Encuentro a defenderlo una vez más. Especialmente, en este contexto actual queremos defender los derechos que hemos conseguido. Vamos a luchar con uñas y dientes para que nuestro país no retroceda. Ni un paso atrás”.
Al interior de ese enorme evento excepcional que significa cada año cada Encuentro Plurinacional, se dan otros pequeños-grandes momentos. Acciones que finalmente se concretan en escenarios de Encuentros, pero que requirieron de andares previos y, sobre todo, de aprender al andar.
El sábado a la tarde, a la vera del lago Nahuel Huapi, las más de mil compañeras que le dieron forma al bloque intersindical feminista montaron un pecherazo.
Yamile Socolovsky, Secretaria de Género de CTA-T y Secretaria de Relaciones Internacionales de CONADU, compartió el tras bambalinas de la escena performática que incluyó el jingle “La cumbia de la unidad”.
“Desde hace mucho tiempo venimos construyendo con las compañeras de otras centrales sindicales y de las organizaciones de la economía popular una unidad que ha estado presente en todos los años de la resistencia durante el gobierno de Mauricio Macri y que ha seguido construyéndose, fortaleciéndose, sosteniendo demandas, reivindicando conquistas y planteando que nuestra presencia es ineludible en la profundización de la democracia, en la construcción de la democracia que necesitamos. Y me parece que es muy importante observar y valorar nuestro recorrido, porque ha implicado e implica reunirnos permanentemente, discutir, encontrar síntesis, ponernos de acuerdo. Es decir, nuestro modo de presencia en la calle requiere de un fuerte trabajo de organización, de generación de dispositivos de cuidado, de construcción de pronunciamientos comunes. Lograrlo da cuenta de una capacidad política sindical superlativa y de la convicción que tenemos de que la unidad es fundamental y estratégica para conquistar derechos y defenderlos. Sabemos que nos necesitamos las unas a las otras”
Karina Nicoleta, responsable de la Secretaría de Género de la Asociación Gremial de Trabajadoras y Trabajadores de Subte y Premetro, se sumó a la reivindicación: “Entendiendo la compleja coyuntura de avance de las derechas es muy necesario reivindicar los espacios de construcción colectiva desde los feminismos populares, desde nuestra identidad de laburantas y disidencias organizadas”.
La jornada del domingo cerró con una marcha de cinco kilómetros. Desde el Alto, la zona más pobre de Bariloche, 70.000 mujeres y disidencias bajaron hasta el Velódromo Municipal. El bloque intersindical feminista fue parte de las más de 30 cuadras de movilización.
A una semana de las elecciones, las calles de Bariloche repletas de feministas vibraron con una fuerza de mucha esperanza.
En representación de CICOP, Carolina Pérez Duhalde enumeró algunas de las batallas: “Las mujeres unidas en este Encuentro marchamos y levantamos nuestros puños para defender las conquistas que hemos ganado. Sabemos que aún nos faltan y que es un desafío colectivo seguir avanzando y sostener lo que conquistamos. El aborto legal y gratuito, la ESI, la memoria para recordar que son 30 mil. Sabemos que es posible. Avanzamos un montón y no vamos a permitir que nadie nos quite lo conquistado y nos impida ir por más”.
A favor de la defensa de las políticas públicas también se posicionó Clarisa Spataro, subsecretaria de Género de la CTA y coordinadora del área de Géneros de ATE Capital: “Vamos a seguir defendiendo un Estado fuerte y transformador que llegue a todo el pueblo trabajador de la Argentina para que no gane la ultraderecha de nuestro país”.
Treinta y seis Encuentros a casi cuarenta años de la recuperación de la democracia en Argentina. Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Intersexuales, Bisexuales y No Binaries acompañando y reforzando el transcurrir de una sociedad. Las sindicalistas organizadas, presentes.
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